Desde sus inicios a la edad de 17 años dentro de las colecciones de alta costura, Sabina Nougarède, fundadora de la marca Interdicción se dedica a una nueva pasión: La joyería. En 2010 ella comenzó naturalmente ensamblando y bordando joyas sobre piezas únicas. Es en el año 2015 que ella realiza su primera colección de joyería en plata y fantasía bañada en oro. Hoy asociada a un joyero ella sube su nivel para ofrecer un producto inspirada en sus viajes y diferentes culturas que ella admira. Ella desea igualmente rendir homenaje dibujando y creando colecciones con mucha personalidad. El tándem crea sus piezas originales y atrevidas en su taller parisino.